Mi podcast: ¿Y por qué no aquí?

lunes, 12 de enero de 2009

Clavos, gore-tex y ganas de pasarlo bien

El pasado viernes, con la tremenda nevada caída en Madrid, nos pidieron desde Soitu a los colaboradores en países fríos si podíamos mandar algún consejo. No tenía muy claro lo que querían y yo escribí un texto, el que viene a continuación. En Soitu.es tan sólo se publicó un estracto, como se puede ver aquí.
Clavos, gore-tex y ganas de pasarlo bien
Este mundo está al revés. Yo aquí, en Noruega, con dos grados sobre cero y sin la ansiada nieve que nos permita desempolvar los esquís, dando consejos de qué hacer con la tremenda nevada y el menos en el termómetro que envuelve España. Lo primero, deberías leer el último artículo que publiqué en Vida Urbana, “Cosas que tú nunca harías en la nieve”, porque quizás sea ahora un buen momento para empezar a hacerlas.
No hace falta vivir en Noruega para saber que los temporales de nieve tienen cosas buenas y malas. Empecemos por las positivas y recordar a todo el mundo el pasarlo bien. Aquí en Noruega están tan acostumbrados a la nieve que casi no se ve niños haciendo guerras de bolas y eso es lo más divertido. Jugar en la nieve no tiene edad, y a todo el mundo le sube la adrenalina arrearle un buen bolazo a su compañero de oficina. En este país nórdico es normal usar las mañanas de fin de semana para buscar alguna loma en la que deslizarse con la gran variedad de trineos que existen, pero en última instancia, bien se puede coger una bolsa de plástico del super, agarrarse fuerte y disfrutar como un niño.

Pero también está el lado oscuro. Frío y resbalones. Respecto a lo primero, gore-tex es la clave. Mis botas, mis pantalones, mi chaqueta y hasta el gorro son de este material, y a pesar de no ser barato, y menos es España, es una buena inversión. No entra ni una gota de agua, y manteniéndose uno seco, no te resfrías. El hielo es otro peligro, y más en nevadas como las que caen en España, porque la nieve se congela, luego cae otra pequeña nevada que cubre el hielo y ahí llega el batacazo seguro, cuando andas confiado. En Noruega son bastante populares unas suelas con clavos que se enganchan al calzado. En principio uno piensa que sólo es para señoras mayores con problemas de movilidad, pero después de que uno ha caído de bruces un par de veces, reconoce que el invento no es tan malo. Simplemente es como salir al mercado con botas de fútbol, quizás no muy estético, pero sí muy práctico.
Así que con los pies fijos al suelo, el cuerpo caliente y traspirado, sólo nos falta afinar la puntería y engancharle al colega un buen bolazo a la salida del trabajo.

viernes, 9 de enero de 2009

Debatiendo con gripe, el desenlace

Da gusto los lectores fieles que me empujan a escribir. Me vais a perdonar, pero este post va a ser sólo para responder los comentarios, que es la forma más rápida:
-La charla en Ràdio 4 al final salió bien. Fué curiosa una conversación en la que se mezcla todo el rato el catalá y el español. De esto hablaré algún otro día, porque en Noruega pasa a veces también porque tienen dos idiomas oficiales muy similares, bokmål y nynorsk, y también entre suecos y noruegos, que cada uno habla su idioma y todos se entienden.
-Con las prisas, no grabé el programa, y he intentado encontrar un podcast en la web de Ràdio 4 pero no lo encuentro. Si hay alguno que sea mejor con la tecnología que yo y lo encuentra, se lo agradecería.
-Sobre la nevada en Madrid: justo por la tarde, me escribieron desde Soitu para pedir una colaboración sobre eso. Lo podéis leer aquí.
-A María: me vas a perdonar, pero tu nombre, como el mío, es bastante corriente y no caigo si nos conocemos o no. Tu perfil está cerrado y no puedo ver quién eres. Ah, el programa ha sido hoy, no mañana, ya lo siento.
PD: El médico me ha diagnosticado hoy pulmonía, así que no leáis con mucha fuerza, a ver si os vais a contagiar.

jueves, 8 de enero de 2009

Debatiendo con gripe

A pesar de la frase con la que acabé mi anterior post, la gripe también llega a Noruega. Y de qué forma. Desde el martes llevo con más de 38 de fiebre. Y mi mujer y mi hijo. Un panorama. Pero aún así, no sé si es mi afán de protagonismo o la profesionalidad (más bien lo primero), me han llamado de RNE en Barcelona, Ràdio 4, para hacer un debate mañana sobre la crisis del gas. Algo así como ciudadanos en Europa, cómo nos afecta. Y les he dicho que sí. Así que si mañana por la mañana vais a Internet (porque en la radio creo que sólo se oye en Cataluña), www.rtve.es, entre las 10.00 y las 10.30 más o menos, escucharéis una mala versión de lo que soy. Voz gangosa y tos frecuente, para hacer un debate de lo más ameno. Aquí no hablo como periodista, sino como ciudadano en Noruega, así que no creo que me exija mucho esfuerzo. Entre líos familiares y enfermedades, he escrito muy poquito últimamente, pero hay bastantes cosas a las que meterles mano: ilegalización de la prostitución, enfrentamientos con gases lacrimógenos frente a la embajada de Israel...
Y mejor me acuesto que ya no sé ni qué teclas golpéo.